Mi individualismo y otros ensayos.
Sōseki desgrana sus ideas sobre el ser humano, el progreso o el futuro de la nación japonesa en un alegato a favor de la independencia personal, de la libertad y de la tolerancia que puede ser considerado una afirmación de valores humanistas de significado universal.
Mi individualismo (1914), el ensayo más conocido de Sōseki, marcó un punto de inflexión en la evolución del pensamiento japonés de comienzos del siglo xx e hizo germinar una nueva intelectualidad japonesa cimentada en la libertad individual y una mentalidad progresista. Por vez primera se publican en castellano, cuatro de los ensayos más representativos de Sōseki, una antología de breves textos basados en reflexiones privadas y conferencias públicas del padre de la novela japonesa moderna y figura central de la literatura nipona del siglo pasado.
Mi individualismo y otros ensayos reivindica la figura de Soseki como mediador entre culturas, como conciliador entre Oriente y Occidente, como ejemplo de que, más allá del conflicto, los puntos en común universales en todas las culturas son las bases necesarias sobre las que construir el mutuo entendimiento y el autoconocimiento.
Incluye: Apertura y progreso del Japón contemporáneo, El contenido y la forma, La literatura y la moral, Mi individualismo.
Autor: Natsume Sōseki
*Natsume Sōseki (1867-1916), padre de la literatura japonesa moderna, nació en Tokio en 1867 y vivió una infancia marcada por la desgracia. Se volcó en los estudios hasta alcanzar una brillante formación intelectual como Licenciado en Lengua y Literatura Inglesas por la Universidad de Tokio, donde comenzó a trabajar como profesor. Su consagración literaria llegó en 1905 con su primera novela Soy un gato y Botchan, en 1906, gracias a cuyo éxito abandonó la docencia para centrarse en su carrera de escritor y articulista. Alcanzó su cumbre literaria con El caminante (1912), Kokoro (1914) y Las hierbas del camino (1915), obras de madurez que destacan por la honda caracterización psicológica de los personajes y el lúcido análisis de la sociedad nipona. Fue también precursor del realismo mágico de Haruki Murakami con obras como Misceláneas primaverales, destacado poeta de haiku (Sueño de la libélula y Tintes del cielo) y autor de ensayos sobre literatura y sociedad considerados obras capitales para comprender la intelectualidad japonesa de su tiempo (Mi individualismo y otros ensayos).